Una extracción dental es necesaria cuando un diente está severamente dañado por caries, traumatismos o infecciones que no pueden tratarse de otra manera. También es común en el caso de muelas del juicio que no tienen suficiente espacio para erupcionar correctamente, provocando dolor o apiñamiento dental. Además, dientes fracturados, con enfermedad periodontal avanzada o que afectan a la salud bucal general también pueden requerir extracción. En Clínica Colodro, especializada en extracciones y tratamientos dentales en Jaén, te asesorarán para determinar el mejor tratamiento según tu caso.

Un implante dental consiste en un pequeño tornillo de titanio que se inserta en el hueso maxilar o mandibular, actuando como la raíz de un diente perdido. Este procedimiento se utiliza para reemplazar dientes ausentes de manera fija y duradera, proporcionando una base sólida para colocar una corona dental, que restaurará la estética y funcionalidad del diente. En Clínica Colodro, utilizamos tecnología avanzada para garantizar un tratamiento seguro y efectivo.

Después de un tratamiento dental, es crucial evitar ciertos alimentos para proteger la zona tratada y permitir una correcta cicatrización. Durante los primeros días, debes evitar alimentos duros como nueces, caramelos o hielo, ya que podrían dañar la zona tratada. Los alimentos pegajosos, como el chicle o las gominolas, también deben evitarse porque pueden adherirse a los dientes y complicar la limpieza. Asimismo, los alimentos muy calientes o fríos pueden causar sensibilidad en la zona afectada. Opta por alimentos blandos y templados, como sopas, purés o yogur, hasta que la recuperación esté más avanzada.

Lo ideal es acudir al dentista cada 6 meses para un chequeo general y una limpieza profesional, aunque en algunos casos se puede recomendar acudir con mayor frecuencia.

Después de un blanqueamiento dental, es fundamental evitar alimentos y bebidas que puedan manchar los dientes, como el café, té, vino tinto o alimentos ácidos. Durante las primeras 48 horas, los dientes son más susceptibles a las manchas, por lo que es importante optar por una dieta blanda y mantener una buena higiene bucal. Además, evita fumar y utiliza pasta dental para dientes sensibles si sientes molestias.

La clave para prevenir la enfermedad de las encías es mantener una rutina diaria de higiene oral. Cepíllate los dientes al menos dos veces al día con una pasta dental que contenga flúor, utiliza hilo dental para eliminar la placa entre los dientes, y considera enjuagues bucales antisépticos. Además, es fundamental acudir regularmente a nuestra clínica dental en Jaén para limpiezas profesionales y chequeos que detecten problemas a tiempo y aseguren la salud de tus encías.